El otro día oí en una conversación, "estoy en contra de las redes sociales", un comentario que seguramente se dijo sin pensar demasiado. En este caso estaba claro que estaban hablando del comportamiento de según que gente cuando entra en Facebook, Tuenti...
La verdad es que la palabra red, para mi, que soy una persona especialmente sensible a temas sociales, es un término que me gusta bastante. El medio que estoy usando en este momento, Internet, es conocida mundialmente como la red de redes.
Si bien es cierto que en los últimos años han aparecido en la red, otras redes, más conocidas como redes sociales. La definición de red social resulta difícil para cualquier persona que no esté muy familiarizada con este mundillo.
Así todos hemos oido hablar en alguna ocasión de Orkut , hotmail, del.icio.us, Napster, juegos en linea, chats, foros, spaces y todos los peer to peer...
En realidad todo esto son redes que, en Internet, engloban de alguna manera a todo tipo de personas para desarrollar algúna actividad en común.
>>más sobre redes sociales
(interesante artículo que habla de todo esto)
En estos primeros años del milenio en que todos nos hemos vuelto bastante individualistas, parece que tenemos que tirar de Internet para compartir todo lo que no estamos dispuestos a dar y recibir de nuestro entorno. Así este tipo de redes tienen un éxito increíble.
No es que no me gusten las redes sociales, me parecen muy útiles para compartir todo tipo de experiencias con personas de cualquier parte del mundo. Lo que es reprochable es el uso de algunos de estos recursos. Como siempre, los excesos se suelen plasmar en problemas, adicciones...
Otras veces, cuando ojeas un poco por Facebook u otras redes de este tipo te sorprende ver que gente que conoces fuera de allí se comporta de una forma un tanto diferente, "se desatan" y muestran esa faceta que a veces te sorprende para bien y otras te muestra lo peor de cada uno, pues aquí parece que todo vale, en fin, no deja de ser interesante, si no se ahonda en lo que yo llamaría superficial o chabacano. Lo cierto es que para la mayor parte de la gente no es más que otra forma de pasar el tiempo, porque eso sí, requiere un montón tiempo el rellenar formularios de registro, de reconocimiento de caracteres y un sinfín de autorizaciones, que nunca sabemos a que conllevan, por no hablar de esas invitaciones que no dejan de ser graciosas que te llegan constantemente de amigos en la red.
Otra cosa con la que la gente disfruta es viéndose en fotos y vídeos, nada que no hayamos hecho en algún momento en el salón de nuestra casa o en algún bar, con nuestros amigos. Si a esto le añadimos el factor nostalgia, nos enredamos casi seguro en la búsqueda de gente de nuestro pasado, doy fe de que te sorprende retomar el contacto con quien menos te imaginarías. No es de extrañar encontrar las típicas fotos del colegio, perfectamente datadas, con los nombres de todos cuantos allí aparecen. Está claro que estos usos pueden ser a mi juicio creativos y enriquecedores.
Sólo me queda señalar que toda esta información puede estar compartida con tanta gente que hace un tiempo nos hubiera sido imposible imaginarlo, por lo que todos estos escaparates se convierten en una herramienta de recopilación de información muy potente, la mejor herramienta para recopilar información respecto a gustos, costumbres y si vamos más lejos, también lo que les pasa a diferentes grupos de amigos lo que se suele llamar memoria oral. Algunas de estas redes recopilan otros conocimientos bastante más específicos en torno a millones de temas. Lo malo es que no se si nos damos cuenta de que todos estos ingenios o redes son a su vez empresas o acaban en manos de ellas. No se donde leí que Facebook pretendía quedarse con los derechos, de por vida, de cuanto allí se colgaba fotos, etc. Parece que no lo ha logrado, habrá pues que estar alerta, ¿te imaginas...?
La verdad es que la palabra red, para mi, que soy una persona especialmente sensible a temas sociales, es un término que me gusta bastante. El medio que estoy usando en este momento, Internet, es conocida mundialmente como la red de redes.
Si bien es cierto que en los últimos años han aparecido en la red, otras redes, más conocidas como redes sociales. La definición de red social resulta difícil para cualquier persona que no esté muy familiarizada con este mundillo.
Así todos hemos oido hablar en alguna ocasión de Orkut , hotmail, del.icio.us, Napster, juegos en linea, chats, foros, spaces y todos los peer to peer...
En realidad todo esto son redes que, en Internet, engloban de alguna manera a todo tipo de personas para desarrollar algúna actividad en común.
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(interesante artículo que habla de todo esto)
En estos primeros años del milenio en que todos nos hemos vuelto bastante individualistas, parece que tenemos que tirar de Internet para compartir todo lo que no estamos dispuestos a dar y recibir de nuestro entorno. Así este tipo de redes tienen un éxito increíble.
No es que no me gusten las redes sociales, me parecen muy útiles para compartir todo tipo de experiencias con personas de cualquier parte del mundo. Lo que es reprochable es el uso de algunos de estos recursos. Como siempre, los excesos se suelen plasmar en problemas, adicciones...
Otras veces, cuando ojeas un poco por Facebook u otras redes de este tipo te sorprende ver que gente que conoces fuera de allí se comporta de una forma un tanto diferente, "se desatan" y muestran esa faceta que a veces te sorprende para bien y otras te muestra lo peor de cada uno, pues aquí parece que todo vale, en fin, no deja de ser interesante, si no se ahonda en lo que yo llamaría superficial o chabacano. Lo cierto es que para la mayor parte de la gente no es más que otra forma de pasar el tiempo, porque eso sí, requiere un montón tiempo el rellenar formularios de registro, de reconocimiento de caracteres y un sinfín de autorizaciones, que nunca sabemos a que conllevan, por no hablar de esas invitaciones que no dejan de ser graciosas que te llegan constantemente de amigos en la red.
Otra cosa con la que la gente disfruta es viéndose en fotos y vídeos, nada que no hayamos hecho en algún momento en el salón de nuestra casa o en algún bar, con nuestros amigos. Si a esto le añadimos el factor nostalgia, nos enredamos casi seguro en la búsqueda de gente de nuestro pasado, doy fe de que te sorprende retomar el contacto con quien menos te imaginarías. No es de extrañar encontrar las típicas fotos del colegio, perfectamente datadas, con los nombres de todos cuantos allí aparecen. Está claro que estos usos pueden ser a mi juicio creativos y enriquecedores.
Sólo me queda señalar que toda esta información puede estar compartida con tanta gente que hace un tiempo nos hubiera sido imposible imaginarlo, por lo que todos estos escaparates se convierten en una herramienta de recopilación de información muy potente, la mejor herramienta para recopilar información respecto a gustos, costumbres y si vamos más lejos, también lo que les pasa a diferentes grupos de amigos lo que se suele llamar memoria oral. Algunas de estas redes recopilan otros conocimientos bastante más específicos en torno a millones de temas. Lo malo es que no se si nos damos cuenta de que todos estos ingenios o redes son a su vez empresas o acaban en manos de ellas. No se donde leí que Facebook pretendía quedarse con los derechos, de por vida, de cuanto allí se colgaba fotos, etc. Parece que no lo ha logrado, habrá pues que estar alerta, ¿te imaginas...?
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